LLevar una vida verdadera y pura
Filipenses 4: 8
Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honorable, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si alguna alabanza, a esto estad atentos.
Todo lo que es verdadero” es el primer aspecto que rige a una persona que vive en Cristo. Aquí la palabra “verdadero” denota veracidad moral; no significa verdadero en hecho. Una persona que vive en Cristo no es falsa ni mentirosa. Todo lo que hagamos o digamos es verdadero. Ninguno que realmente vive a Cristo practica la falsedad en ninguna de sus formas. En conclusión, una persona que vive en Cristo es veraz.
“Todo lo honorable” es el segundo aspecto. La palabra griega traducida “honorable” significa venerable, digno de reverencia, noble y serio (1 Ti. 3:8, 11; Tit. 2:2); evoca la idea de dignidad, lo cual inspira y produce reverencia. Un creyente que vive en Cristo es honorable, noble, moderado, serio, e inspira respeto y admiración.
No pensemos que sólo las personas de edad son honorables. También los jóvenes y aun los adolescentes que viven en Cristo inspiran respeto. porque Dios mora dentro de ellos. Puesto que somos vasos que contenemos a Dios, Dios mismo es nuestro valor, honor y dignidad.
Actuar con dignidad no quiere decir darse importancia, sino vivir en Dios. Por ejemplo, un cofre tiene valor únicamente si contiene una joya, pues ésta es la que le da el valor. Del mismo modo, nosotros, como vasos que contenemos a Cristo, tenemos la verdadera dignidad. De esta manera, cuando los demás observen nuestra conducta, sentirán un profundo respeto por nosotros. La palabra griega traducida “honorable” implica profundo respeto. Este es el segundo aspecto que rige a una persona que vive en Cristo.
Vivir en Cristo significa haberse negado a si mismo y haber permitido que Cristo viva en su corazon y no solo que viva sino que gobierne su vida, es haber llegado a la madurez de poder decir YA NO VIVO YO MAS VIVE CRISTO EN MI.
¿Como renunciar a si mismo? Este es el gran paso que Jesucristo nos recomendo, al igual que Juan Bautista cuando dijo: Es necesaio que El crezca y yo mengue. El verdadero opositor de Jesucristo en nuestro corazon es el "YO", porque solo hay un "YO" y es Jesucristo mismo, El dijo: Yo soy el buen pastor, yo soy el camino, y la resurreccion y la vida, yo soy la puerta, yo soy la luz del mundo, yo soy la verdad y la vida, yo soy el alfa y el omega, el principio y el fin. Solo hay un "yo" y debemos dejar que el verdadero "yo" (Cristo) sea quien viva en nuestro cuerpo que es "templo de Dios".
Usted tiene que llegar al convencimiento de que Cristo mora dentro de usted, que su cuerpo es templo del Espiritu Santo, que usted es hijo de Dios, que ha nacido de nuevo, que es nueva criatura y que es santo. Repitase constantemente todo esto a cada instante, llegue a ese convencimiento y su vida sera otra, sus acciones y sus pensamientos seran otros, Usted sera propiedad de Dios y su vida cambniara radicalmente. Eso es "buscar primeramente el reino de Dios y su justicia y todo lo demas lo tendreis por añadidura.
Bendito sea el Señor. Amen